Presentación de de Almudena García, presidenta de la Asociación Española del Comercio e Industria de la Madera (AEIM), en REBUILD 2022.
España tiene industria, tiene comercio y mucha superficie forestal. Que tenemos la responsabilidad de cuidar, pero también de consumir.
España es un país con superávit forestal. Tenemos mucha madera, pero también son necesarios una industria y un comercio para ponerla en circulación. Sin ellos, de poco serviría plantar y recolectar. La madera es un material que se planta y que se cosecha. Igual que un producto agrícola.
En España existe una industria representativa y capaz, en todos los segmentos de transformación de la madera. En primer lugar, los rematantes, y a continuación empresas de todos los tamaños; un sector preparado para preparar para la industria todos los aprovechamientos forestales. Por último, las empresas de segunda transformación de la madera. Que generan productos y los ponen en el mercado, dentro y fuera de España.
Se trata de un tejido industrial no tan potente y moderno como el que tienen países como Finlandia, Austria o Alemania, aunque sí suficiente para absorber los recursos forestales que genera nuestro territorio.
No falta madera, falta consumo de productos de madera. Cada año consumimos menos de lo que el bosque genera. Nuestros montes producen madera todo el tiempo, es un material infinito. El problema no es la deforestación, sino el abandono del bosque, porque no se da valor a los recursos que nos regala.
España tiene industria, tiene comercio y mucha superficie forestal. Que tenemos la responsabilidad de cuidar, pero también de consumir.