De la reunión de Junta directiva de AEIM, celebrada el 22 de septiembre, 2023.
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Hasta el verano la demanda y las ventas de madera, tableros y productos derivados han ido bastante bien, similares al año anterior. Pero a partir de septiembre se percibe un ambiente de calma y ralentización, con cierta preocupación de los clientes.
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La tendencia a la baja en los precios, especialmente de viga laminada y de la madera de coníferas, está contribuyendo a esta situación de apatía. Los nórdicos están ajustando sus producciones a pesar del crecimiento en la capacidad por las grandes inversiones realizadas, especialmente en la producción de viga laminada y CLT.
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La bajada en la demanda para maderas de frondosas y tropicales ha sido similar a la de coníferas.
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No obstante, la situación varía según sectores. Así, el “Contract” y el bricolaje siguen con demanda positiva. Así, se destaca la buena tendencia en las grandes superficies como “Obramat”, con aperturas de nuevos centros, enfocada a profesionales. No obstante, el ticket medio en compras de particulares ha bajado algo.
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El sector del embalaje se está viendo afectado por la caída de las exportaciones. También la industria del mueble está sufriendo la menor renta disponible de las familias.
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Uno de los principales factores de este enfriamiento de la demanda, entendemos que se debe al retraso en el inicio de la obra pública que está programada, en tanto y cuanto no se termine de conformar un nuevo gobierno.
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En general los pedidos son más pequeños y los almacenes pequeños viven al día, sin querer tener apenas stocks y con la idea de rotar al máximo.
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En cuanto a mercados de exportación, se destaca la situación negativa en Alemania y Francia. Mientras que la situación de la construcción en grandes países como China y Estados Unidos, está a niveles bajos.